"Según el Libro Negro del Comunismo, en la China de Mao, los comunistas no se comían a los bebés pero sí los cocían para fertilizar los campos, declaró Berlusconi este domingo.
El ministro de Exteriores chino explicó el miércoles que su Gobierno estaba muy insatisfecho con esas palabras sin fundamento. Los líderes italianos deberían utilizar palabras que beneficiasen la estabilidad y desarrollo de las relaciones entre China e Italia, ha dicho el ministro en un breve comunicado. "En fin.
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