En Roma, un prelado que trabaja para la Secretaría de Estado Vaticano, se había acercado a una zona de prostitución en busca de placer mercenario, había aparcado su coche, se había quitado la sotana estaba esperando dentro de su coche para encontrarse con un transexual, cuando unos policía echaron una mirada dentro y lo pararon, justo para un control rutinario.
Al ver a los policías intentó escapar de manera precipitada, yendo a chocar contra tres coches. Luego, cuando por fin los policías lograron alcanzarlo, empezó a golpearles, hasta tal punto que tuvieron que ir al hospital. El prelado ahora tendrá que responder al juez, ante el cual se le ha denunciado por desacato, resistencia a pública autoridad y lesiones.
- el plural -
viernes, mayo 19, 2006
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario